- El día 6 de marzo, a las 18.00 horas, se aborda la obra ilustrada del dibujante valenciano, ‘El tesoro del Cisne Negro’, que cuenta el expolio y la recuperación del tesoro de ‘La Mercedes’
Las Palmas de Gran Canaria, 4 de marzo de 2020.- ‘El tesoro del Cisne Negro’, álbum del dibujante valenciano Paco Roca publicado hace dos años por la editorial bilbaína Astiberri, rescata y reconstruye la historia de la fragata española Nuestra Señora de la Mercedes, hundida en 1804 en el cabo de Santa María, frente a las costas de Portugal, por navíos británicos que pretendían robarle su preciosa carga de más de medio millón de monedas de oro y plata.
El día 6 de marzo, a las 18.00 horas, dicha novela gráfica, en la que se aúna la historia, el cine, la televisión, la arqueología submarina, la política y la diplomacia, ocupa la atención del Club de Lectura del Cómic Las Ranas de la Biblioteca Insular (calle Remedios, 7) que coordina Luciano Díaz.
Los cómics de Paco Roca (autor, entre otros, de ‘Arrugas’, ‘Los surcos del azar’, ‘El invierno del dibujante’ y ‘La casa’) han estado presentes en alguna que otra ocasión en el Club de Lectura del Cómic Las Ranas de la Biblioteca Insular. Con ‘El tesoro del Cisne Negro’, Paco Roca plantea, a partir de un guion original del diplomático y escritor Guillermo Corral, una intriga trepidante basada en hechos reales que recupera para los lectores todo el atractivo de la aventura clásica, a la vez que ofrece una perspectiva inédita sobre los entresijos de la política española, del poder y de las relaciones internacionales.
Alejandro Amenábar ya está trabajando en el guion de una miniserie de seis capítulos inspirada en este cómic, cuya producción correrá a cargo de Fernando Bovaira (MOD Producciones), a pesar de que Señor Mono Producciones estuvo involucrada inicialmente en el proyecto. Este mismo año comenzará su grabación. Paco Roca sigue siendo un autor de interés para el mercado audiovisual español. Novelas gráficas como ‘Arrugas’ y ‘Memorias de un hombre en pijama’ ya han sido adaptadas al cine bajo la técnica de la animación. Además, hace poco presentó ‘Los surcos del azar’ (Fantagraphics), novela gráfica que también opta a su adaptación audiovisual.
Para el periodista, guionista y escritor Jesús Marchamalo, esta “historia de buenos y de malos –piratas, abogados, ministros y asesores, servicios de espionaje– trufada de aventuras, cartas náuticas, brindis, diplomacia y amor” se convierte en “un relato deslumbrante en el que se mezcla la documentación histórica con una trama casi policial y unos escenarios tan minuciosamente recreados que nos traen el recuerdo de los tebeos de Tintín, el regusto de las grandes epopeyas de Salgari o los documentales del capitán Cousteau”.
Recapitulemos: mayo de 2007. La principal empresa cazatesoros del mundo capta la atención de la opinión pública al anunciar que ha descubierto en aguas del Atlántico el mayor tesoro submarino encontrado jamás. Según la limitada información difundida por la empresa el hallazgo corresponde a un buque misterioso, el Cisne Negro. Sin embargo, hay indicios que apuntan a que se trata en realidad de un pecio español. Comienza así una fascinante trama jurídica y política, cuyas raíces se remontan a hechos acaecidos dos siglos atrás, y en la que un pequeño grupo de funcionarios va a enfrentarse en defensa de nuestra historia a todo el poder mediático y la influencia de la compañía norteamericana. Hubo un juicio en los tribunales de EE.UU. que otorgaron la propiedad del tesoro a España. Las monedas regresaron en 2012 a nuestro país.
Paco Roca, que recibió en 2019 en Los Ángeles tras su paso por el festival Comic Con de San Diego, el premio a toda una trayectoria en el mundo de la viñeta, se enamoró de la historia cuando Guillermo Corral, agregado cultural en Washington y más tarde director general en el Ministerio de Cultura, se la contó en Washington. Roca, heredero de la línea clara (Tintín y la tradición franco-belga), quiso reflejar en esta obra el romanticismo de la aventura clásica, de Stevenson, Hergé y todo ese tipo de historias, pero siendo realista.