Fernando Clavijo lamenta que el PSOE se negara a modificar la nueva Ley de Cadena Alimentaria para salvar a los productores canarios
“No hay justificación alguna para que los senadores socialistas canarios hayan levantado la mano en contra del plátano canario”
La excepción defendida por CC no suponía agravio alguno para ningún otro territorio o producto del Estado y suponía la diferencia entre la supervivencia del sector o su desaparición
Madrid a 2 de diciembre de 2020.
El pleno del Senado, con el voto particular del PSOE, ha rechazado hoy la enmienda presentada por Coalición Canaria para evitar que el proyecto de Ley de la Cadena Alimentaria supusiera un golpe de muerte a sector del plátano canario tal y como ha denunciado Asprocan.
El senador nacionalista, Fernando Clavijo, había logrado la semana pasada el apoyo de PP y ASG, CS, PNV, ERC e Izquierda Confederal a su enmienda en la Comisión de Agricultura (lo que obligaba a que el proyecto de Ley volviera a pasar por el Congreso de los Diputados para incorporar la excepción al plátano) sin embargo, en la sesión plenaria, el PSOE y los grupos que apoyan al Gobierno, votaron en contra de la misma lo que supone “un golpe mortal” al sector platanero canario.
Como explicó Clavijo, la excepción pedida para el plátano canario salvaba a este producto de quedar “fuera de mercado”. Es decir, dejaba al plátano canario fuera de la obligación de fijar un precio mínimo de venta para todas las transacciones y todas las categorías de plátanos por parte de las organizaciones de productores de plátanos de Canarias; “una obligación que es de gran utilidad e interés para el resto de productos pero que, de facto, supone un golpe a la competitividad del plátano canario”. Ya que, tal y como ha quedado redactada la ley sin la incorporación de la enmienda nacionalista, se favorece la competencia de la banana de terceros países, provocando en consecuencia la bajada drástica de las ventas del producto nacional, al que se abocaría a una irremediable retirada de mercado de gran parte de su producción.
“Hablamos de una pérdida potencial para el sector de 100 millones de euros anuales y de la no comercialización de 150 millones de toneladas de plátano canario” lamentó Clavijo.
Tal y como explicó el senador nacionalista canario, el sector del plátano canario tiene características únicas que justificaban su excepcionalidad; no compiten con ningún territorio europeo puesto que su competencia es con terceros países que son ajenos a la normativa europea y la totalidad de los productores se encuentran en Canarias y están agrupados en torno a una única asociación.
El proyecto de Ley que aprobó el Senado es, a juicio del senador autonómico Fernando Clavijo, una normativa tramitada por vía de urgencia durante la actual pandemia “con la que coincidimos en los objetivos generales”, especialmente en lo que se refiere a reforzar la figura y el papel de los productores agrícolas en la cadena de suministro alimentario y en la consecución de una rentabilidad adecuada para un sector excesivamente vulnerable.
Sin embargo, señala Clavijo, “estos objetivos tan necesarios no son válidos en el caso del plátano de Canarias ya que va a suponer una pérdida de competitividad en el mercado frente a otros productos importados por terceros países, un incremento significativo de la retirada de volúmenes del mercado de forma innecesaria, la generación de una distorsión en su comercialización y un perjuicio para su valoración en el mercado”. De ahí la calificación de que esta ley supone un “golpe mortal” al sector que afronta ahora el peligro de su desaparición.
Así, el senador nacionalista aseguró no entender el voto de los senadores socialistas canarios “han levantado la mano en contra del interés de este sector productivo canario sin justificación alguna” ya que esta excepción planteada para el plátano canario “no va en contra de ningún otro producto ni contra ningún otro sector del territorio español”.
“Con sinceridad”, señaló Clavijo, “confiaba en que hubiera un cambio de criterio en el PSOE o, por lo menos, en los senadores socialistas canarios y que sumaran su voto para salvar el plátano canario pero tristemente no ha sido así”. “El voto socialista no tiene explicación alguna”, reiteró Clavijo, “nadie entiende su oposición a una excepción imprescindible para proteger un producto cuya principal debilidad surge precisamente por la propia realidad de un territorio, Canarias, que cuenta con la máxima protección y las máximas garantías de la Unión Europea”.
Los nacionalistas insisten en que “añadiendo esta excepción, coincidimos plenamente con la intención de esta iniciativa” y con las palabras pronunciadas en su momento por el ministro en las que expuso la necesidad de “lograr un impacto positivo y necesario mediante el fomento del reparto equitativo del valor añadido y el reequilibrio de la cadena alimentaria, la mejora de la capacidad de negociación de los eslabones más débiles de la cadena y el fortalecimiento de la competitividad de los operadores agrarios y alimentarios”.
Equidad, equilibrio y “fortaleza para los más débiles” son también los tres objetivos que perseguía la excepción al plátano para evitar el empobrecimiento de los agricultores y la muerte de un sector, el del plátano, que a partir de ahora puede ser arrasado por la banana que se importa de terceros países.