- La formación política lamenta que el primer edil sacara un comunicado de prensa anunciando la emisión de las carnestolendas en la televisión pública y que se trate de una mentira más
Juan Antonio Peña, concejal y portavoz de Ciuca – Ciudadanos para el Cambio en Telde, lamenta que el alcalde de Telde, Héctor Suárez (CC), “mienta una vez más a la ciudadanía” y centra su crítica en las afirmaciones que realizó su gobierno al decir que “este sábado se emitiría la gala del carnaval en horario nocturno mediante la Televisión Canaria”. Una cuestión que “se emitió desde alcaldía como nota de prensa y que los medios de comunicación divulgaron”.
Además, asegura que el comunicado se lanzó “con el fin de paliar la fuerte avalancha de críticas que estaba sufriendo el gobierno municipal al no repartir de manera justa las entradas a la gala del Teatro Juan Ramón Jiménez y sí asignarlas a dedo”. Añade que “el alcalde se apresuró a decir una fecha y hora y se ha demostrado, una vez más, la improvisación de sus acciones políticas”.
Subraya que “el gobierno de Suárez contrató a una productora externa para realizar la grabación de la gala privada, sin cerrar aún el día y la hora con la Televisión Canaria, y eso se ha demostrado”. Peña lamenta que “la posible emisión del carnaval teldense se haga a destiempo y en una franja horaria poco atractiva y con una fuerte competencia de otras cadenas de televisión”.
El portavoz de Ciuca – Ciudadanos para el Cambio insiste que “el dinero gastado por el pacto de Héctor Suárez (CC), más de 55.000 euros, en la gala del carnaval de Telde, pone a la luz los intereses del primer edil, el jolgorio y la farándula” y agrega que “ha invertido en un evento privado, sin justificación de necesidad y para unos 200 invitados”. Asegura que “ese dinero se pudo haber invertido en las familias más desfavorecidas del municipio, apoyar a los artistas locales o fomentar el empleo y la economía local”.
Peña hace un llamamiento “a la solidaridad, el compromiso y a la realidad” y centrar los esfuerzos del gobierno “en las necesidades reales de los ciudadanos, que poco se aproximan a las necesidades de ocio y el gasto del dinero público en fiestas”.