Las Palmas de Gran Canaria, domingo 11 de abril de 2021.- La viajante (2020) es puro Festival Internacional de Cine de Las Palmas de Gran Canaria: la ópera prima de Miguel Ángel Mejías es la cristalización de un director que ha crecido inmerso en el certamen, asimilando sus influencias edición tras edición. “Es cierto, mi identidad como cineasta se ha nutrido de todo lo que vivido en el Festival”, apunta el propio realizador, que, por otra parte, firma un primer largometraje con indiscutible sello de autor y concebido para ser disfrutado en sala. Un ritmo propio y unas pautas que el propio Mejías se fijó a la hora de sacar adelante un proyecto con un trazo conceptual bien marcado.
La viajante relata la huida hacia adelante de Ángela (la actriz Ángela Boix), su encuentro con un viajero misterioso (Miquel Insúa), un drama que subyace y una afición por rodar insectos en una road movie peculiar, que se toma sus propios tiempos. “Quería jugar justo con eso: esta película está hecha para que el espectador se sumerja en ella en la sala, para que se tome su tiempo viéndola”, apunta el director.
Mejías justo apunta que “cuestionar cómo nos relacionamos hoy con el tiempo” se incluía en la intencionalidad que perseguía en La viajante. “Es un pequeño acto subversivo por mi parte, en una película que es como una pequeña sinfonía, con sus modulaciones. Hay una línea narrativa, en la que me tomo la licencia de tomarme pausas, salirme y luego volver a regresar. Es ahí donde sur-gen las preguntas”.
Por ello, el film, más que para verse, está realizado “para vivirse, para habitar también todos esos lugares que se muestran y que se recorren”. Espacios no necesariamente identificados, que aluden al Universo, en general. Y que en realidad fueron el decorado natural que tuvieron las cinco semanas de rodaje que llevó La viajante en las islas de Tenerife, Fuerteventura y Gran Canaria. Paisajes “por los que he llegado a pasear a diario en mi vida cotidiana”, explica.
El guion estaba concebido de antemano para Ángela Boix (actriz habitual en los cortos previos de Mejías) y Miquel Insúa. Así que su interpretación se ajusta como un guante al propio ritmo de la película. Además, director y protagonista femenina tuvieron la desgraciada coincidencia de sufrir la enfermedad de un familiar cercano durante el rodaje, circunstancia también crucial en la película. “Eso hizo que mantuviera una conexión muy especial con Ángela”, apunta Miguel Mejías, “que hacía que a veces incluso nos entendiéramos con una mirada. Realmente surgió una magia ahí, por-que no necesitábamos palabras”.
El paisaje acaba siendo relevante en la película, aunque más bien porque todo en él está en movimiento, “aunque los protagonistas permanezcan quietos”, explica Mejías. Como sucede con esos planos de Ángela como conductora. En otras ocasiones, sin embargo, esos personajes se exponen a situaciones trágicas como meros testigos, que no necesariamente se resisten a la tentación de grabar esa tragedia en crudo.
La viajera llega ahora a Canarias Cinema como un título que está creciendo en el circuito. Ha pasado por Trieste (Italia) y Valencia. “Parece que le ha ido bien, y aún le queda recorrido”, resume su autor, inmerso ya el en el proyecto de su siguiente largometraje.
Del Festival Internacional de Cine de Las Palmas de Gran Canaria, Mejías guarda “siempre un gran recuerdo, la única pena que tengo es no poder estar este año”, debido a sus compromisos profesionales en Suecia, en donde reside en la actualidad. En todo caso, su firma forma parte de la historia previa del certamen de la capital grancanaria, con presentaciones de cortos como Icelands (2016). Su obra regresa a Canarias Cinema como la de un autor maduro, que reconoce el impacto que ha tenido el propio Festival en su formación, y, sobre todo, que agradece “los encuentros que he podido mantener ahí con otros cineastas con los que he compartido inquietudes, referencias e influencias”, recalca.
La viajante se proyecta a las 10:00 horas de este lunes 12 de abril, en la Sala Cinesa 9 del Centro Comercial El Muelle. El acto está sujeto a las correspondientes medidas de seguridad para combatir la propagación de la COVID-19, siendo obligatorio el uso de mascarillas y el respeto de la distancia social en las proyecciones.