El vicepresidente y consejero de Hacienda, Román Rodríguez, explica en el Parlamento que el Archipiélago trabajará por incluir este asunto en la próxima revisión de la Estrategia europea para estos territorios

El vicepresidente canario y consejero de Hacienda, Presupuestos y Asuntos Europeos, Román Rodríguez, adelantó hoy en el Parlamento que el Ejecutivo autónomo trabajará para que la Estrategia Europea para las Regiones Ultraperiféricas (RUP), que se revisará el primer semestre del próximo año, incluya una respuesta adecuada al fenómeno migratorio.

Rodríguez, que compareció en la Comisión de Asuntos Europeos y Acción Exterior, lamentó la ausencia de una política europea “integral, estructural y estable” en materia migratoria y reivindicó también la introducción del concepto de solidaridad vinculante, de modo que se establezcan mecanismos reglados de cooperación con los territorios fronterizos, de manera que éstos no soporten en solidario el peso de la inmigración irregular.

A este respecto, el vicepresidente señaló que en los últimos 20 años la Unión Europea no solo adolece de política en materia de inmigración, sino que ha desviado su acción hacia las interpretaciones duras defendidas por los países más conservadores. “Antes -dijo- había una concepción de las migraciones más respetuosas con los derechos humanos”.

El vicepresidente recordó las iniciativas presentadas por Canarias en los distintos foros europeos celebrados en los últimos diez meses, en las que llamó la atención sobre la difícil situación que atraviesan aquellas regiones que constituyen la frontera de la UE ante el incremento en la llegada de migrantes.

“Vamos a seguir insistiendo allá donde sea necesario para que Europa atienda estas peticiones y se active una política migratoria solidaria”, dijo Rodríguez, quien denunció también la ausencia de financiación adecuada para la atención de los menores inmigrantes, como los 2.600 que ahora mismo atiende Canarias.

Una de las acciones que desarrollará la Dirección General de Asuntos Europeos será la negociación, junto con el resto de Regiones Ultraperiféricas, los Estados miembros y la Comisión Europea, para que la próxima revisión de la Estrategia de la UE hacia las RUP integre específicamente una respuesta adecuada y proporcionada a los efectos de la crisis generada por el Covid-19 y una acción decidida de apoyo a estos territorios en materia migratoria.