La norma agiliza la gestión y control de los fondos europeos del Next Generation EU que se utilizarán para su fortalecimiento
El Parlamento convalidó hoy el Decreto-Ley de Medidas urgentes para la agilización administrativa y la planificación, gestión y control de los fondos procedentes del Instrumento Europeo de Recuperación denominado Next Generation EU en el ámbito de la Agencia Tributaria Canaria, aprobado el pasado 28 de abril por el Gobierno de Canarias. Precisamente, la Agencia desarrollará un Plan de Transformación Digital 4.0 en el marco de los citados fondos, con un presupuesto estimado de 31 millones de euros, a ejecutar en un plazo de tres años.
El vicepresidente y consejero de Hacienda, Presupuestos y Asuntos Europeos, Román Rodríguez, explicó que el acuerdo permitirá el fortalecimiento de la Agencia Tributaria, mediante el incremento de recursos humanos y tecnológicos, “con el objetivo de facilitar las obligaciones fiscales de los contribuyentes y asistirlos técnicamente y combatir el fraude”.
El Decreto-Ley cuenta con el dictamen favorable del Consejo Consultivo de Canarias sobre la urgente y extraordinaria necesidad argumentada por el Gobierno, así como sobre su propia competencia para legislar al respecto.
Rodríguez, que es también presidente de la Agencia Tributaria, señaló que el decreto ley incluye una serie de medidas administrativas que permitirán desarrollar las acciones de mejora tecnológica con cargo a los fondos procedentes del Next Generation EU y se faculta al presidente de la Agencia a la aprobación de la Relación de Puestos de Trabajo y a las modificaciones de esta.
La norma también modifica el artículo 35 de la Ley reguladora de la ATC y establece los mecanismos para el desarrollo e implantación de los sistemas de telecomunicaciones y tecnologías de la información y de la seguridad en tales procesos.
Precisamente, en el desarrollo de este tipo de herramientas es fundamental para la lucha contra el fraude fiscal, por lo que su aplicación permitirá a la Agencia Tributaria Canaria incrementar su capacidad de detectar comportamientos fraudulentos, al posibilitar establecer perfiles de riesgo muy precisos, anticipar comportamientos y compararlos de manera inmediata con contribuyentes similares o analizar y visualizar de manera intuitiva relaciones de diversa índole.
