La joven ganadera Marta Quintana representa al municipio en el acto oficial con motivo del Día de la Mujer Rural, que se celebrará este jueves en el Cabildo de Gran Canaria. La alcaldesa Ana Hernández y la concejala de Igualdad, Elena Suárez, han visitado este lunes la granja de Marta Quintana, en el Mondragón, para mostrarle su apoyo y comunicarle que el Ayuntamiento estará arropándola en ese reconocimiento insular, en el que se da visibilidad a mujeres de los 21 municipios de la isla por su contribución al desarrollo y garantizar con su labor la seguridad alimentaria.

Ana Hernández asegura que “es un homenaje muy merecido por todo lo que aporta la mujer al mundo rural, y que en actos como este se le da más visibilidad a un trabajo fundamental de 365 días”, y añade que este año “nos representa una mujer joven, ganadera y formada, que debe servir de ejemplo a muchas jóvenes porque el mundo rural necesita de ese relevo generacional para que el sector agroalimentario continúe vivo”.

Por su parte, Marta Quintana agradeció al Ayuntamiento haber sido propuesta al Cabildo este año para representar al municipio, reconoció que hay pocas mujeres actualmente trabajando en este sector “o por lo menos no están en el primer plano”, además de animar a otras mujeres a dedicarse a la ganadería, “aunque es duro, pero también muy bonito”.

Marta María Quintana Pérez, de 38 años, es ganadera y licenciada en Veterinaria. Nació en Valleseco y explica que sus padres eran ganaderos y agricultores de la papa. Ella explica que casi todas las vacaciones del colegio se las pasaba en casa de su abuela, en Firgas, con su tío, que es ganadero y agricultor de papas, millo y sementera para el ganado. “Con solo 12 años, lo acompañaba a las romerías con la yunta y yo le ordeñaba y le atendía las 12 vacas frisonas más las crías, y con 17 empecé a llevar la yunta en las romerías y a las ferias con mi tío”, explica la empresaria.

Asegura que siempre le ha gustado dedicarse a los animales, “pero mi madre me decía que primero tenía que estudiar y luego me dedicara a lo que quisiera, por eso estudié Veterinaria porque era la única carrera que me gustaba”.

Marta Quintana explica que lleva 8 años en Ingenio y con su marido, con el que tiene dos hijos, mantiene una explotación con vacas canarias y un ganado de más de 300 cabras.