- La antológica, que se inaugura el día 26 de octubre (19:00 horas), expone abundantes piezas pictóricas, escultóricas y cerámicas, algunas nunca vistas, así como correspondencia epistolar, libros, documentos y fotografías
Las Palmas de Gran Canaria, 24 de octubre de 2022.- La mirada visionaria y poliédrica de la creadora Pino Ojeda (Gran Canaria, 1916-2002), la primera mujer que en Canarias se atrevió a inaugurar en 1958 una galería de arte en la zona del paseo marítimo de la playa de Las Canteras, se recoge en la muestra antológica que el Centro de Artes Plásticas de la Consejería de Cultura del Cabildo grancanario inaugura el día 26 de octubre, a las 19:00 horas.
La muestra denominada ‘El universo Pino Ojeda’ se organiza cuando se cumplen dos décadas de su desaparición, exhibiendo en el mencionado espacio un conjunto de obras que recorren su intensa trayectoria plástica, algunas de ellas nunca expuestas hasta el momento. La exposición, que podrá ser visitada hasta el próximo día 9 de diciembre de lunes a viernes de 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00 horas, está comisariada por el nieto de la artista y presidente de la fundación que lleva el nombre de la artista y poeta grancanaria, Domingo Doreste.
El incansable tesón de la poeta que pintaba, como solía definirse Pino Ojeda por formar parte del panorama cultural de las islas y su colaboración en el impulso de éste, le ha posicionado como de uno de los referentes en el ámbito artístico canario, pionera del informalismo en el Archipiélago y una de las fundadoras del Grupo Espacio.
El conjunto exhibido en ‘El universo Pino Ojeda’ no sólo recoge sus obras plásticas elaboradas en el transcurso de los años 50 a los 70, sino piezas de su producción cerámica y escultórica, así como abundantes materiales de su periplo literario, bibliografía y rico material epistolar que da cuenta de la relación mantenida en vida por la artista nacida en Teror con los más insignes escritores y creadores del pasado siglo, como los nobel Juan Ramón Jiménez y Vicente Aleixandre, Camilo José Cela, Carmen Laforet, Gerardo Diego, Gloria Fuertes, Rafael Alberti, Nuria Espert, Gabriel Celaya, José María Millares, Juan Ismael, Plácido Fleitas, Lola Massieu o Felo Monzón, entre otros.
Su primer cuadro realizado
La exposición muestra al público las diferentes técnicas utilizadas por Pino Ojeda en su obra plástica. Desde las mágicas lacas o el empleo de la encáustica en frío, al gouache, pasando por el pastel, la acuarela, la tinta y el carboncillo, abarcando tres etapas: desde sus comienzos, en los años 50 hasta los 60 con una proyección insular, pasando por los años 60 a los 70 con su salto a nivel nacional, y una tercera que revisa desde los años 70 a los 85, ya cuando logra su consagración a nivel internacional.
Como exclusiva, el público podrá contemplar su primer cuadro (un paisaje de su soñada Laponia que visitaría años más tarde) y algunas de las obras realizadas a principios de los años 70 en el seno de la Escuela Municipal de Bellas Artes y la Escuela Luján Pérez, con bocetos nunca expuestos. Así, como parte de su producción cerámica y escultórica en la que destaca su obra ‘El Cristo de la esperanza’.
La exposición presta especial atención a sus ‘Hojas de poesía Alisio’, editadas de 1952 a 1954 (en la que publicarían autores destacadísimos de la Generación del 27, de la Generación del 50 o a caballo entre ambas) publicación de la que se cumple este año el 70 aniversario, así como a distintas referencias de su obra publicada e inédita, en la que destaca el protagonismo de su primer poemario ‘Niebla de sueño’ publicado en Madrid en 1947, del que asimismo se cumple ahora el 75 aniversario de su primera edición.
Otra parte de la muestra se centrará en sus herramientas de trabajo y enseres personales más íntimos, a la que se suma una colección de fotografías inéditas escogidas de entre más de 3.000 instantáneas rescatadas de su archivo personal, algunas de ellas realizadas y reveladas por la propia artista. Otro grupo de fotografías exhibidas, realizadas bajo el lema ‘Miradas ajenas’ en la propia casa de Pino Ojeda, nos acerca la figura de esta ingobernable y activista cultural a través de la mirada de los cuatro fotógrafos profesionales residentes en Gran Canaria, Marcos Martin, Manuel García, Guillermo Maya y Osvaldo Cipriani.
La gran mayoría de los materiales que integran la muestra ‘El universo Pino Ojeda’ pertenecen a la fundación cuya sede está localizada provisionalmente en las dependencias de la propia vivienda particular en la que residió la creadora, consejera de Cultura del Cabildo grancanario se mostró sorprendida por la ingente y valiosa cantidad de documentación que se custodia en la sede de la mencionada fundación, ubicada provisionalmente en la que fuera vivienda particular de la polifacética creadora grancanaria, situada en el barrio capitalino de Escaleritas, en donde se conserva parte de su biblioteca personal, un archivo con notable e importante correspondencia manuscrita, primeras ediciones de buena parte de los libros canónigos de la literatura española firmados y dedicados por sus autores, cintas de audio grabadas por la propia Ojeda durante su inquieta trayectoria artística, obra de su producción cerámica y pictórica, así como numerosas fotografías que dan cuenta de la enérgica y fructífera actividad que la creadora llevó a cabo no solo en las islas, sino en la península y en el extranjero.
Pino Ojeda es un personaje aglutinador de la cultura literaria y de la creación artística capaz de generar continuas y múltiples sinergias, una intelectual y creadora en el más amplio sentido de los términos. Su aportación como activista cultural fue fundamental en la escena artística de Gran Canaria en la segunda mitad del siglo XX. Su obra se inscribe en el marco de una generación trascendental de artistas canarias, como Lola Massieu, Chona Madera o Jane Millares, entre otras, que convivieron y desarrollaron su obra en un contexto insular muy concreto.
La muestra impulsada por la Consejería de Cultura del Cabildo grancanario no solo da cuenta de la prolífica y heterogénea capacidad creadora de la artista como una de las precursoras del arte abstracto en Canarias, que además cultivó diversos géneros literarios, sino de las múltiples conexiones que mantuvo con las vanguardias de la época que la proyectaron internacionalmente como una mujer independiente y adelantada a su tiempo, que fue respetada por muchos de sus coetáneos. Un ejemplo de esa voluntad de enriquecerse con los nuevos soportes expresivo fue su serie realizada en los noventa con diseño por ordenador, que permitieron a Ojeda seguir explorando paraísos sin fronteras. Se conservan más de un centenar de dibujos de dicha seria, de los cuáles se podrán observar algunos en la muestra del Centro de Artes Plásticas.