El Ayuntamiento de Gáldar ha concluido los trabajos de estabilización de una vivienda abandonada en Juncalillo que quedó parcialmente derrumbada el pasado 19 de enero tras varios días seguidos de lluvia y que ha provocado cortes de tráfico desde entonces en la carretera insular GC-220. El Consistorio galdense, después de haber realizado los trámites legales pertinentes y notificar a los propietarios de la casa, que es de propiedad privada, ha ejecutado los trabajos de forma subsidiaria en esta vivienda, que se encuentra protegida en el catálogo municipal, por un importe de 24.000 euros.
De esta manera el Ayuntamiento de Gáldar puso en conocimiento del Cabildo de Gran Canaria, titular de la vía, la conclusión de estos trabajos y esta mañana se procedió a la reapertura del tráfico. La estabilización arrancó el pasado miércoles y se ha acelerado lo máximo posible con el objetivo de recuperar la normalidad en la circulación de vehículos cuanto antes. Las lluvias caídas esa semana en los Altos de Gáldar causaron el derribo parcial de esta vivienda deshabitada desde hace muchos años a la entrada de Juncalillo provocando la caída de cascotes en la orilla de la calzada.