Las Palmas de Gran Canaria, 8 de marzo de 2018.- La narradora Andrea Farah está acostumbrada a trabajar con peques de corta edad a los que, acompañados de sus madres y padres, o como a ella gusta definirlos, “cuidadores amorosos”, cuenta historias para que terminen observando tras sus palabras “el hilo invisible del corazón”, dice.
Farah protagoniza el día 9 de marzo, a las 17.45 horas, unas de las más populares y antiguas iniciativas de carácter gratuito de la Biblioteca Insular de Gran Canaria (calle Remedios, 7), ‘La hora del cuento’, una actividad pedagógica encaminada a fomentar la lectura y su comprensión orientada en esta ocasión a bebés entre los 2 a los 7 años.
La cuentista grancanaria cree que “hablar de las emociones nos iguala, y las aventuras de las protagonistas de sus cuentos sirven para entender que la emoción no entiende de separación. Todos y todas nos movemos con el latido del corazón, y todos y todas estamos unidos por un fino hilo invisible que nos une. Si para algo sirve el cuento es para eso... para que veamos el hilo invisible del corazón”, admite Farah. Por eso su sesión de cuentacuentos se llama ‘Buscando el latido’.
Ser familia mono-marental transformó todo su mundo y también la vinculó al mundo de los cuentos, dónde aún se considera una recién llegada. Andrea Farah trabaja desde hace más de 17 años en el mundo del espectáculo, la organización de eventos y los movimientos sociales. Ha combinado su formación en procesos participativos con su experiencia de trabajo como payasa y animadora infantil y, actualmente, es responsable de Producciones en la Arena, una empresa canaria de teatro y música, mayoritariamente orientada a producir eventos y espectáculos para público infantil fomentando las actividades teatrales, musicales y de talleres para niños y niñas.
En su sesión de cuentacuentos Andrea Farah utilizará sombras chinas, música, y teatro con objetos “para mostrar cuentos que hablan de emociones, de retos, de sueños. Cuentos que hablan sobre personajes, mayoritariamente femeninos, valientes o de fantasía. Mi propósito es asombrar y a la vez hacer pensar a los niños y niñas sobre cosas sencillas e importantes como: los sueños, la imaginación, la felicidad y también el amor”, añade.