Jueves, 29 Mayo 2025 12:47

Galdós no mantenía un discurso pesimista, ya que veía en los desastres la oportunidad de inventar parte de la realidad y mezclarla con la ficción

Escrito por
  • El coloquio ‘Galdós ante la guerra’ ofrece la visión del dramaturgo sobre los conflictos de su época

 

  • El acto reunió a los docentes Carolina Fernández Cordero y Javier Ponce Marrero, quienes ofrecieron una charla sobre la postura del escritor ante los hechos que inspiraron su obra

Las Palmas de Gran Canaria, 29 de mayo de 2025- La Casa-Museo Pérez Galdós se convirtió el pasado día 27 de mayo en el epicentro de un profundo análisis sobre la relación entre la obra de Benito Pérez Galdós y los conflictos bélicos de su tiempo. El evento, que contó con una veintena de asistentes, reunió a los docentes universitarios Carolina Fernández Cordero y Javier Ponce Marrero, quienes ofrecieron un diálogo sobre la figura del novelista como narrador de la sociedad de su época y su abordaje de las complejidades políticas, sociales, culturales e históricas del siglo XIX y principios del XX.

Carolina Fernández Cordero, galdosiana y profesora de Literatura Española en la Universidad Autónoma de Madrid, aportó su visión sobre la perspectiva literaria de Galdós. Por su parte, Javier Ponce Marrero, profesor de Historia Contemporánea de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, contextualizó históricamente el periodo abordado en la obra de Galdós.

Los ponentes explicaron que la historia, para Galdós, era un elemento fundamental y que la historia de principios del siglo XX estaba muy ligada a la guerra, un tema recurrente en obras como ‘Trafalgar’, que narra la batalla homónima. Galdós utilizaba este elemento para contrarrestar otras narrativas. Sin embargo, se aclaró que en el siglo XX la guerra no era un tema central de manera explícita para él, sino transversal, enfocándose más en temas sociales.

A diferencia de novelistas y periodistas posteriores, Galdós no vivió directamente la experiencia de la guerra, lo que le permitía analizarla sin estar implicado y manipular lo que quería contar, añadiendo elementos de su imaginación. No todo lo que escribía era estrictamente verdad y, a menudo, necesitaba recurrir a otras fuentes para construir su opinión.

Entre los puntos abordados en el acto, se destacó la “guerra de opiniones” entre intelectuales y su impacto en las relaciones internacionales, así como el papel de la propaganda, que evolucionó con la incorporación de imágenes gracias a los avances tecnológicos. Se señaló la existencia de diversos tipos de propagandistas y se mencionó que el soborno era una práctica habitual en periódicos al servicio de embajadas y servicios diplomáticos.

En cuanto a las barreras de la información de la prensa, se identificaron la falta de credibilidad de las fuentes, la existencia de listas negras que restringían la mención de ciertas personas, el elevado costo del papel, las restricciones a la libertad de prensa y la escasez de publicidad, que repercutía en menores ingresos.

Un momento histórico relevante que se comentó fue el intento de Alemania de que España se uniera a la guerra, algo que Alfonso XIII no pudo aceptar debido a la amenaza de conquista de Canarias y Baleares si se unía. Se hizo hincapié en la ‘francofilia’ presente en la propaganda y el cine de la época, con la notable excepción de Galdós, quien curiosamente sentía aprecio por lo inglés, algo poco común entre los pensadores de su tiempo.

Este evento también llevó a cuestionar los modelos de la Restauración. Se concluyó que Galdós no mantenía un discurso pesimista, ya que veía en los desastres la oportunidad de inventar parte de la realidad y mezclarla con la ficción.