El alcalde de Gáldar, Teodoro Sosa Monzón, hizo entrega este viernes a las mujeres que aún mantienen viva la tradición de la venta del pescado en la calle, las conocidas como “sardineras”, de tres puestos acondicionados y preparados para cumplir con los requisitos necesarios para una adecuada manipulación y comercialización del pescado.
Teodoro Sosa quiso con esta iniciativa dotar a las tres mujeres que en la actualidad siguen realizando esta actividad desde hace más de 50 años en el municipio, dos de ellas en el casco y una en la playa de Sardina, de unos carros acondicionados con recipientes y doble fondo para poner el hielo picado y mantener el pescado alto siguiendo las recomendaciones de la veterinaria municipal.
El alcalde galdense hizo entrega de estos puestos a las tres hermanas Díaz García, Rosario, Dolores y María, conocidas pescaderas de Gáldar que llevan décadas dedicadas a este oficio y que han mantenido esta actividad tradicional dando vida al sector pesquero y sacrificando muchas horas de su vida para lograr un salario mínimo con su venta de pescado fresco.
Teodoro Sosa expresó su satisfacción porque por fin esta actividad y las mujeres que la desempeñan y que han formado parte de la imagen cotidiana, del día a día y del transcurrir de esta ciudad, puedan tener una mayor tranquilidad y estabilidad a la hora de trabajar, contando con unos puestos realizados expresamente para ello, donde mostrar y vender sus sardinas, viejas y caballas en perfectas condiciones y con una adecuada manipulación del producto.
Así lo había anunciado el alcalde en el pasado mes de febrero donde a propuesta del grupo de gobierno se aprobó la modificación de la ordenanza fiscal reguladora de dominio público local con puestos y venta ambulante, “para adaptarla y que se pueda regular esta actividad de venta de pescado en la vía pública por parte de estas mujeres y a las que puedan dar continuidad a esta labor en el futuro”.
El próximo lunes estos carros de venta de pescado ya pasarán a formar parte de la imagen de estas pescaderas que podrán continuar esta labor con sus nuevos puestos, decorados en blanco y verde, el color de Gáldar, y con el escudo del Ayuntamiento de esta Ciudad.