El Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana ha ofrecido a los ganaderos del municipio un curso específico destinado a mejorar las técnicas de alimentación de los ganados ovino y caprino para optimizar la calidad de vida de los animales y optimizar su rendimiento.
Organizado por el Servicio de Extensión Agraria y Desarrollo Agropecuario y Pesquero del Cabildo de Gran Canaria, con la colaboración de la Concejalía de Agricultura y Ganadería que dirige el edil José Carlos Álamo, este curso fue impartido durante las jornadas del martes y miércoles en el Centro de Formación de El Tablero.
El curso, en el que participaron una veintena de ganaderos de la costa y medianías de este municipio, fue impartido por el veterinario de la Agrupación de Defensa Sanitaria (ADS) de los Ganaderos Profesionales de La Palma, César Bravo Muñoz, uno de los mayores especialista en producción caprina de Canarias y responsable sanitario de la Asociación de Criadores de Cabras de Raza Palmera.
Las seis horas de este intenso curso de carácter teórico tuvieron como objetivo formar a los ganaderos para mejorar el bienestar de los animales de sus granjas y a obtener el máximo rendimiento económico de las explotaciones ganaderas evitando enfermedades metabólicas y optimizando el manejo de las raciones alimentarias.
Raciones y vitaminas
Con esa finalidad, en el programa lectivo se abordaron las curvas de lactancia y la capacidad de ingestión y ganancia de peso de los animales como base definitoria del ciclo productivo anual de las cabras; las necesidades nutritivas del ganado según su estado fisiológico (en mantenimiento o cabras secas, preparto y lactancias temprana o tardía); las claves a tener en cuenta para elaborar y optimizar las raciones para las razas de cabras canarias; la importancia de la suplementación vitamínico-mineral en la alimentación y la planificación de los racionamientos según el estado productivo de los animales.
El veterinario Bravo Muñoz también informó a los ganaderos sobre cómo reconocer y evitar la Acidosis y la Toxemia de gestación, que son las dos enfermedades metabólicas más importantes derivadas de fallos en el racionamiento del ganado; el uso del control lechero como herramienta de gestión para mantener y aumentar la rentabilidad de las explotaciones; la obtención de una recría sana y suficiente como base para aumentar el rendimiento de las granjas; los partos a los 13 meses de vida como base de un futuro productivo óptimo y, también, cómo mantener una buena salud ruminal como base para maximizar la producción y longevidad de los animales.