Las Palmas de Gran Canaria, martes 20 de junio de 2017.- La Fundación de Arte y Pensamiento Martín Chirino celebrará el próximo jueves, 22 de junio, a las 20 horas, una velada en la que conviven música y cine mudo, como parte del programa de actos de las Fiestas Fundacionales de Las Palmas de Gran Canaria.
A las 20:00 horas, en el exterior del Castillo de La Luz, arrancará el concierto ‘Noche Barroca’ en el que la orquesta Beau Soir ofrecerá una particular interpretación del repertorio del Siglo de Oro español. A continuación, a las 21:00 horas, aproximadamente, el pianista argentino Federico Lechner pondrá música en simultáneo, gracias a la colaboración de Fábrica La Isleta y la Fundación Chirino, a la proyección de dos clásicos del cine mudo en blanco y negro: El castillo encantado, el célebre cortometraje de George Méliès, realizado en París, en 1896, en los orígenes del cinematógrafo; y El castillo Vogelöd, largometraje realizado en Alemania en 1921 por F.W. Murnau.
La primera parte del espectáculo, el concierto ‘Noche Barroca’, a cargo de Beau Soir, ha sido especialmente montado para ser estrenado el próximo jueves 22 de junio. Este veterano trío de músicos está compuesto por Isabel Álvarez (voz), Andreas Prittwitz (saxo, clarinete y flauta) y Daniel Oyarzábal (piano), y ofrecerá un repertorio de grandes temas del Siglo de Oro español, con composiciones o piezas inspiradas en letras de Cervantes, Lope de Vega, Calderón de la Barca, Vélez de Guevara, J. Marin, J. Hidalgo, Salazar y Torres, Gaspar Sanz, Montemayor, Francisco Guerau o Arañés.
Por su parte Federico Lechner es un experimentado músico argentino que comenzó a tocar el piano a la edad de 3 años, de la mano de su madre, Lolita Lechner. Ha colaborado con destacados artistas y es especialista, con ritmos muy peculiares, que incluyen el jazz, en acompañamientos a imágenes de cine mudo. Su música sonará junto al corto El castillo encantado, de apenas tres minutos y medio de duración y uno de los primeros que realizó Georges Mélies, que ofrece efectos de ilusionismo trucando las imágenes en formato cine, su gran especialidad. El castillo Vögelod, de Friedrich Wilhem Murnau, es un largometraje de 82 minutos de duración, que fue filmado en apenas dos semanas, y que pese al minimalismo de su acción –un enredo de aristócratas alemanes- consigue un interesante desenlace lleno de intrigas, y acorde a los cambiantes ritmos del piano de Lechner.