El grupo de arte urbano internacional Boa Mistura pinta en la fachada del IES El Tablero I Aguañac su primer mural en Gran Canaria, con una frase poética del cancionero de Rosana Arbelo y el patrocinio del Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana
El primer trabajo mural que el grupo de arte urbano internacional Boa Mistura realiza en la isla de Gran Canaria quedará totalmente culminado este viernes en la fachada del IES El Tablero I Agüañac, en El Tablero. Lo protagoniza a todo color la leyenda poética “Las calles se confunden con el cielo y nos hacemos aves sobrevolando el suelo”, extraída de la canción ‘Sin miedo’, perteneciente al álbum ‘Lunas Rotas’ (1996) de la compositora y cantautora canaria Rosana Arbelo.
Se trata de un proyecto cultural participativo patrocinado por el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana, que ha requerido casi dos años de gestión a fuego lento y que finalmente ha fructificado gracias a la implicación directa del Instituto y su comunidad educativa, del profesor de Artes Plásticas Néstor Romero, de la arquitecta María José Melián y de la primera teniente de alcalde Elena Álamo Vega.
El mural, de unos 80 x 1,60 metros recibe el título de ‘Simbiosis’ por pintarse con la participación colaborativa de estudiantes del municipio, vecinos de El Tablero e incluso artistas murales de la Isla, que pintaron todo el fondo. Esa es una fórmula de acción social que los artistas de Boa Mistura vienen empleando como taller de arte en muchos de sus proyectos alrededor del mundo: en Nueva York, Ciudad del Cabo, India, Kenia, Noruega, España, China...
El mural de El Tablero es obra de tres de los diez artistas que actualmente integran Boa Mistura, concretamente Juan Jaume (Ldo. Bellas Artes) de Madrid; María Corrales (Lda. Arquitectura) también de Madrid, e Irene García (Lda. en Diseño de interiores) de Cáceres. Boa Mistura surgió en Madrid a finales del año 2001 por la unión polifacética de Javier Serrano (arquitecto), que ya no forma parte del grupo, Rubén Martín (ingeniero de caminos), Pablo Purón (publicista) y Pablo Ferreiro (Ldo. en Bellas Artes). A todos ellos les unía en principio su interés por el graffiti y sus pintadas en espacios abiertos y nunca en vagones de tren, pero una meditada reflexión general sobre su puesta en escena les llevó a reconsiderar el valor potencial de su gestión artística hasta entonces individualizada y decidieron unir sus esfuerzos para canalizar su acción común hacia “la mejora y transformación de los espacios públicos con el objetivo de mejorar la calidad de vida de la gente a través del arte”. Desde entonces su proyección artística no para de crecer. De su prestigio internacional dan buena muestra sus actuaciones colaborativas de arte urbano en España, Argelia, México, Panamá, Reino Unido, Georgia, Alemania, Estados Unidos, Kenia, Sudáfrica, Noruega, Brasil, Serbia, Chile, Paraguay, Colombia, China, Portugal, Polonia, Nicaragua, Perú, India, Bulgaria y Francia. En Canarias también han actuado en las islas de Tenerife y La Palma. Su última obra de arte participativo antes de llegar a El Tablero ha sido en República Dominicana, en los meses de enero y febrero. Allí contribuyeron al pintado de las barcas de los pescadores de la provincia de Montecristi, dentro del proyecto de Biodiversidad Costera y Turismo apoyado por los ministerios de Turismo y de Medio Ambiente y Recursos Naturales de aquel país. Durante el proceso grabaron parte del documental Crossroads apoyado por Air Europa y Blur Films.
Un mural con intrahistoria
El mural que los tres integrantes de Boa Mistura dejarán pintado en la fachada del IES El Tablero es el resultado de una confluencia de hechos positivos. El proyecto mural tiene intrahistoria. Surgió hace unos dos años, en una clase de arte urbano que el profesor de Artes Plásticas Néstor Romero ofreció a su alumnado, que quedó maravillado por las obras realizadas por Boa Mistura alrededor del mundo. Una de las alumnas de aquella clase compartió sus inquietudes con su madre, la arquitecta Eugenia Richiger, compañera profesional en el estudio Richiger & Melián Asociados de la también arquitecta María José Melián. Ésta última había cursado el Erasmus de Arquitectura en Venecia con Javier Serrano Guerra, el arquitecto fundador de Boa Mistura, y aprovechó su amistad con él para gestionar la posible participación del grupo artístico en El Tablero.
La idea prendió con generosidad y gran entusiasmo generando dentro del grupo un gran debate sobre quiénes conformarían el equipo que debía afrontar el proyecto. Todos querían participar. Como en todas las ocasiones en las que dentro del grupo no se alcanza un consenso unánime, la suerte se la echaron jugando una relajada partida de pin pon sobre la mesa de serigrafía del estudio. El proyecto tomó cuerpo definitivamente una vez que se pudieron cuadrar las agendas de trabajo, se solventaron los compromisos internacionales del grupo, y el Ayuntamiento de San Bartolomé confirmó el patrocinio del proyecto.
Desde el pasado lunes los muralistas Juan, María e Irene viven en El Tablero, como si fueran unos vecinos más del pueblo, en la casa del matrimonio formado por Juana Mari Romano Martín y Julio Pérez Hernández, en la calle Veracruz. En la fachada del Instituto dejarán para el futuro su huella artística, y para el presente un mensaje inspirador de la cantautora lanzaroteña Rosana Arbelo.