- Parques y Jardines elabora un informe para controlar y vigilar el estado de esta especie y garantizar la seguridad a la ciudadanía derivada del mantenimiento de la arboleda
- De los 300 ejemplares revisados, solo dos han sido retirados por poner en riesgo su propia estabilidad
Telde, 12 de junio de 2020.- La Concejalía de Parques y Jardines y Fuentes del Ayuntamiento de Telde que dirige Álvaro Monzón ha elaborado un informe sobre el estado que presentan las palmeras de todos los CEIP del municipio. En el mismo se recoge que, de los cerca de 300 ejemplares revisados, solo dos palmeras han sido retiradas por presentar enfermedades que ponían en riesgo su propia estabilidad.
El informe se enmarca dentro de los planes de la Concejalía sobre el mantenimiento de la arboleda y sus posibles consecuencias en la seguridad ciudadana, lo que propició el estudio pormenorizado desde el pasado mes de octubre para conocer el estado de salud de todas las palmeras y su evaluación continua. El proyecto incluye una codificación especial para cada palmera, de tal manera que cada ejemplar está identificado y localizado, lo que favorece su seguimiento y futuros estudios.
El informe recoge también que la plaga más común para este tipo de árboles es la provocada por la Diocalandra frumenti Fabricius, un coleóptero que ataca taladrando la base de las hojas y que está muy extendida por todas las palmeras de Gran Canaria.
Además, dentro de las enfermedades criptogámicas detectadas se encuentra la Fusarium oxysporum. Se trata de una enfermedad producida por un hongo que invade y deteriora el sistema vascular de la planta, provocando que se marchite y muera. El hongo penetra en la planta por las raíces, invade los vasos del xilema y tapona el sistema vascular.
Otra de las enfermedades comunes es la Nalanthamala vermoesenii, detectada en los ejemplares ubicados en la Avenida del Cabildo. Este hongo, también conocido como ‘podredumbre rosa’, produce pequeñas manchas necróticas en la base de los peciolos y pequeñas gomosis.
Finalmente, una de las enfermedades más peligrosas es la Thielaviopsis paradoxa, un hongo detectado en otros ejemplares del municipio que provoca una enfermedad denominada ‘podredumbre negra’, la cual ocasiona la pudrición de los tejidos internos de estas plantas, dañando la estructura interna de la palmera, que pierde su estabilidad y resistencia y provoca la caída total o parcial del ejemplar. Esta enfermedad no presenta síntomas externos claros que permitan la detección precoz de su presencia.
El concejal del ramo, Álvaro Monzón, apunta que desde el área se trabaja con medidas preventivas y buenas prácticas culturales, entre las que se encuentran evitar el estrés de los ejemplares mediante la reducción del número de podas y el encharcamiento de agua en el suelo; no dañar el sistema radicular de los ejemplares y desinfectar las herramientas de trabajo entre la poda de dos palmeras.