- Desde la irrupción de la pandemia y hasta el cierre de 2020, el área de Cultura ha organizado más de doscientos eventos, movilizado a 2.117 profesionales y congregado a 35.367 asistentes con una incidencia cero en número de contagios sustentada en un riguroso cumplimiento de las recomendaciones sanitarias
- Los datos presentados al Consejo Sectorial de Cultura, al año de la irrupción de la pandemia, respaldan un compromiso centrado en garantizar el derecho de acceso a la cultura y apoyar al tejido cultural
Las Palmas de Gran Canaria, 26 de marzo de 2021.- El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha presentado al Consejo Sectorial de Cultura el pasado 15 de marzo, al cumplirse el año del confinamiento, un estudio pormenorizado del impacto de la actividad cultural en tiempos de pandemia, un análisis, alojado en lpacultura.com, que concluye en que el área seguirá adoptando posturas valientes que, además de garantizar el derecho inalienable de acceso a la Cultura, refuerce al tejido cultural, un sector que se ahoga sin el apoyo institucional.
Las cifras de contrataciones y resultados no dan margen a la duda: desde que se decretara el estado de alarma y hasta final de año, el área que dirige Encarna Galván movilizó a 2.117 profesionales entre artistas y técnicos para la puesta en marcha de 223 eventos que fueron seguidos por 35.367 asistentes directos, pero con un alcance de 415.116, si se tienen en cuenta las reproducciones de los eventos realizados en streaming o las acciones directas en entornos digitales. Todo ello con una incidencia nula en cuanto a contagios.
Cultura, en la línea de una estrategia que defiende la actividad cultural como instrumento de transformación social y desarrollo, inició 2020 con un ambicioso programa que sufrió una sacudida con la irrupción internacional de la Covid-19.
Suspendidos todos los actos previstos en marzo de 2020, lejos de parar la máquina en espera de escenarios favorables, el equipo de Galván, consciente del papel que los organismos públicos, en tanto que entes dirigidos a velar por el bienestar de la comunidad, puso en marcha una serie de acciones que articularan respuestas efectivas tanto como sostén de la industria cultural como refugio que cubriera las necesidades de la ciudadanía.
Si bien, hasta marzo de 2020, el programa se desarrolló con normalidad y se pudo celebrar conforme a lo previsto la actividad relacionada con la Banda Sinfónica Municipal, las agendas de la Red de Bibliotecas Públicas Municipales, museos, salas de exposiciones, teatros y programas como Musicando o Quegles; la actividad quedó en obligado suspenso días previos al confinamiento. A partir de ese momento los esfuerzos se volcaron en reforzar la presencia de la cultura en tiempos excepcionales.
Durante el confinamiento obligatorio se diseñó un plan de acción que, a diario, ofreciera la posibilidad de conectarse con la Cultura en sus distintas manifestaciones: 40 conciertos en directo (desde casa y para casa), 12 piezas breves de teatro inspirados en la obra de Galdós, la adhesión a la iniciativa #PHDesdemibalcón de Photo España y tantos cuentos como semanas de confinamiento se decretaran.
Con la llegada de la desescalada, Encarna Galván presentó el proyecto «Cultura en acción» un sello que, poniendo el foco en los creadores canarios, se ha ido adaptando a los avances y retrocesos de la expansión del virus procurando que la Cultura permanezca imbatible.
Así, bajo el paraguas de «Cultura en Acción», durante el camino a la “nueva normalidad”, el área programó 17 conciertos presenciales para aforos reducidos y retransmisión garantizada en streaming en espacios al aire libre: Palacete Rodríguez Quegles, Castillo de Mata, Pueblo Canario y parque Doramas.
En la antesala del verano, el proyecto activó una propuesta que llevaba tiempo en la recámara: reconvertir Miller en espacio cultural, un espacio que activaría 50 montajes de julio a diciembre, todos seleccionados entre la convocatorias de ideas que abrió el consistorio con este propósito. Solo la actividad de Miller alcanzó a 8.161 personas en sala y hasta 75.000 a través de los streamings en Facebook.
También «Cultura en acción» recuperó eventos que habían quedado aplazados a causa de la crisis sanitaria: «Happy Piano Day 176» y sus 20 conciertos a cargo de 17 pianistas en cuatro puntos de la ciudad; el festival Naifest y la décimo segunda edición de Noche de boleros, ambos en Santa Ana.
Entre estas citas, el área de Cultura, sostuvo su ciclo Musicando vivo. Lo hizo, de nuevo, adaptándose al momento y a las recomendaciones requeridas. Si bien pudo cumplir con las tres primeras citas del año, a partir de la cuarta llegaron los citados Musicando “confinados” y los de la desescalada, y, tras el descanso veraniego, regresó en octubre dando continuidad a la política de distancias, aforos reducidos y registro previo. También los siete conciertos del último semestre de 2020 se cerraron sin ninguna incidencia en cuanto a contagios, sumando a lo largo del año casi cinco mil asistencias.
Cultura, además, logró salvar el TEMUDAS, Festival de Teatro, Música y Danza, lo hizo sorteando dificultades y adaptándose, tanto en calendario como en programación, a las necesidades y recomendaciones que la pandemia imponía: el Festival subió definitivamente el telón en octubre con catorce estrenos de teatro, música, clown, teatro familiar, danza y circo que desembarcaron en la edición más excepcional de su historia, una edición que contó con un programa íntegramente canario, que trasladó la actividad al otoño con el objetivo de potenciar la Cultura en un entorno seguro, y que alcanzó a 5.000 personas.
De otro lado volvió a llevar al Tenorio a Vegueta, también lo hizo teniendo presente el horizonte de restricciones por lo que lo dobló en número de funciones: 2 y organizó su difusión en streaming. El directo fue seguido por 1.000 personas desde Santa Ana (entre 31 de octubre y 1 de noviembre) y 6.000 a través de Facebook.
Igualmente remarcable, según la información facilitada en la memoria, es el compromiso del área con las artes plásticas y los proyectos desarrollados como impulso y promoción de las mismas. No solo la convocatoria de ayudas, una iniciativa lanzada con sello «Cultura en Acción», sino con la apertura de puertas de los espacios culturales que, a excepción del Museo Néstor, en proceso de rehabilitación, acogieron actividades musicales teatrales y expositivas.
En esta línea, entre los muros del Museo Castillo de Mata se celebraron citas de distinta naturaleza, pero, además, la fortaleza dedicó sendas exposiciones al creador grancanario Néstor Martín Fernández de la Torre. La primera, «Néstor íntimo», recuperó dibujos y grabados que se corresponden con distintas etapas del artista. La segunda, que sigue abierta al público, descubrió el proyecto vital del autor: las series «Poema del Mar» y «Poema de la Tierra» tal y como la concibió, en simbiosis, enfrentadas y, aparentemente, suspendidas en el aire. Esta última convive con «Néstor: Ut pictura poesis» una experiencia expositiva que revela la avidez como lector de Néstor y las relaciones que mantuvo con la literatura.
También Mata albergó la exposición «La poesía visual» de Ángel Sánchez y, en colaboración con la Fundación Francis Naranjo, hasta ocho exposiciones más, divididas en tres citas, y mesas de debate junto al Colectivo Gamá, en el marco de celebración del “Día Internacional de la Despatologización Trans”.
Las artes plásticas, además, tomaron espacios públicos de la ciudad como el parque Doramas que dio cobijo a la segunda edición de Biotopías 2, un desafío intelectual ante la degradación del planeta impulsado por el colectivo PSJM.
La frenética actividad de Bibliotecas llenó el vacío provocado por el Covid
Las bibliotecas de la Red Municipal volvieron a abrir el acceso a préstamos en la Fase 2 de la desescalada, a finales de mayo, y según se ha ido avanzando, también permitieron el regreso para el estudio y lectura a las salas. Sin embargo, su actividad tampoco frenó con el confinamiento. Al contrario, el equipo de Bibliotecas ideó mecanismos con los que atender a pequeños y grandes lectores y pusieron en marcha una programación digital, a través de su página de Facebook.
La buena acogida que tuvieron los cuentos del confinamiento hizo que se mantuvieran en días y horarios adaptados para los pequeños de la casa, a medida que volvían al colegio. También los adultos disfrutaron con experiencias virtuales: a través de las Bibliotecas, Cultura recordó el aniversario del nacimiento de Benito Pérez Galdós con doce piezas teatralizadas que estuvieron alojadas en la mencionada red.
La recepción de este tipo de programas invitó a continuar proyectando trayectorias, vidas y ciclos literarios online. Así, la cita semanal con fragmentos inspirados en rincones de la ciudad, «La ciudad escrita», descubrió textos de distinto género situados entre las calles de la capital grancanaria. Una idea que rescató también las hermosas palabras que Agatha Christie escribió sobre Las Palmas de Gran Canaria y que fueron ocupando el muro de Facebook en el mes en el que se celebraba el 130 aniversario de su nacimiento, septiembre.
Esta efeméride, además, también fue el pretexto de un certamen literario basado en el misterio, convocatoria que recibió más de doscientas novelas y cuyas fechas convivieron con la recepción de propuestas para optar a ayudas para la autoedición literaria.
Otra fecha señalada, que no pasó desapercibida para las bibliotecas fue la del 110º aniversario del nacimiento del poeta Miguel Hernández. De nuevo la dramatización de su obra ocupó el espacio virtual con «La palabra que no cesa». Después llegó «Con letra de mujer», nueva cita semanal con fragmentos destacados escritos por mujeres relevantes, tenaces y ejemplares.
La suma en el alcance de estas acciones asciende a 80.000 personas, una cifra que crece a medida que las publicaciones permanecen en la red.
Además de la actividad desarrollada en el universo digital, las Bibliotecas han ido regresando a lo presencial con iniciativas a pie de playa como el programa “Ola de letras”, una carpa en la puntilla que acogió una treintena de encuentros diseñados para públicos reducidos y con garantía de cumplimiento de todas las medidas recomendadas.