La Cámara rechaza las dos enmiendas a la totalidad presentadas a unas cuentas que responden a las necesidades de la ciudadanía desde una óptica progresista

El vicepresidente, Román Rodríguez, señala que “en los peores momentos de su historia, Canarias ha estado en buenas manos”

Los Presupuestos incrementan el gasto social, las inversiones y el apoyo a los sectores productivos, además de aliviar la carga fiscal de los ciudadanos de renta bajas y medias y habilitar 160 millones para la reconstrucción de La Palma

Los cuartos Presupuestos de progreso de la legislatura presentados por el actual Gobierno de Canarias siguen su tramitación parlamentaria tras el rechazo de las enmiendas a la totalidad presentadas por CC y PP.

El vicepresidente y consejero de Hacienda, Presupuestos y Asuntos Europeos, Román Rodríguez, defendió la orientación progresista de unas cuentas que “han permitido durante todo el mandato hacer frente a las diversas crisis que se han sucedido, tanto a nivel global como local, defendiendo a la mayoría social canaria, reforzando los servicios públicos y la inversión e incentivando la economía y el empleo, en una demostración de certidumbre y confianza”.

Rodríguez destacó la estabilidad política que ha permitido la tramitación en tiempo y forma de los cuartos presupuestos de la legislatura y la “responsabilidad, rigor y prudencia” de unas cuentas que han crecido en los últimos cuatros años un 29,6% y han dado respuesta a las necesidades sobrevenidas de la ciudadanía.

El vicepresidente indicó, a este respecto, que “en los peores tiempos Canarias ha estado en buenas manos” y valoró los buenos indicadores macroeconómicos que registra el Archipiélago en estos momentos, a pesar de las incertidumbres globales.

Destacó igualmente que los actuales Presupuestos dan una nueva vuelta de tuerca a la protección de la ciudadanía más vulnerable frente a la inflación, con un ajuste del IRPF que supondrá un coste fiscal de 100 millones de euros y que incluye una deducción extraordinaria progresiva y la mejora de las actuales. Una rebaja impositiva que se realiza a pesar de que Canarias tiene la fiscalidad más baja de Europa (un tercio de la imposición indirecta de España) y sin aumentar el endeudamiento, que, incluso, desciende.

Rodríguez descartó las propuestas de bajadas generalizadas de impuestos que defienden las derechas, “algo que nadie hoy en día reclama en ningún lugar del mundo” y que supondrían un “irresponsable” endeudamiento de la Comunidad Autónoma en momentos de dificultades. En concreto, cifró las rebajas fiscales de la enmienda a la totalidad de CC en 830 millones de euros, a costa de mayor deuda, paradójicamente en un contexto de subidas de intereses, lo que comprometería a las futuras generaciones.

El vicepresidente recordó que las propuestas canarias en ese sentido, selectivas y progresivas, son más intensas y justas que las aprobadas por otras comunidades autónomas y que las medidas se adoptarán sin recurrir al endeudamiento.

Rodríguez recordó también el alto grado de ejecución de gasto que ha caracterizado la gestión del Gobierno de Canarias durante la legislatura, “comparable a los mejores y mejores que la mayoría”, según dijo.

Política social y anticíclica

Los Presupuestos alcanzan los 10.180 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 11,9% con respecto a las cuentas de este año.

El gasto social se sitúa en los 7.478 millones de euros, lo que supone un incremento del 9,4% con respecto al presente ejercicio y de un 31,2%, con respecto a 2019, mientras que las inversiones alcanzan los 1.764 millones, un 27,1% más que este mismo año.,

Derechos Sociales gestionará 669 millones de euros, 207 millones más que en 2019 y 89 más que en el ejercicio vigente, mientras que las políticas de apoyo a los sectores productivos crecen un 133,8% sobre las cantidades de hace cuatro años y se colocan en los 484 millones, lo que, a su vez, supone una subida de 88 millones (+15,38%) respecto al año en curso.

Del mismo modo, las áreas de Sanidad y Educción experimentan un incremento del 26,2% y del 32,7% en relación con 2019, lo que se traduce en un incremento de 787 millones y de 573 millones, respectivamente. De este modo, las partidas sanitarias quedarán “pintadas” en 2023 con 3.793 millones de euros y las educativas con 2.326 millones de euros.