Miércoles, 10 Enero 2024 16:04

El presidente Clavijo reconoce al IES La Isleta por su proyecto para favorecer la integración de jóvenes migrantes

Alumnado de Bachillerato y chicos acogidos en el centro Canarias 50, ubicado en el mismo barrio de la capital grancanaria, han compartido experiencias gracias a un taller solidario de reparación de bicicletas

 

La iniciativa, que el presidente de Canarias ha querido conocer de primera mano, ha hecho al centro merecedor del Premio Nacional de Educación para el Desarrollo Vicente Ferrer y el de Aprendizaje-Servicio

 

El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, subrayó este miércoles que el Ejecutivo canario tiene avanzados los trabajos sobre la propuesta que remitirá al Estado para que se produzca la reforma legislativa “cuanto antes” en las Cortes que permita la distribución obligatoria de los menores no acompañados que llegan a las Islas entre las distintas comunidades autónomas. Así lo comunicó en un acto este miércoles en el que reconoció la labor del IES La Isleta en materia de integración y convivencia.

El presidente Clavijo destacó al IES La Isleta como un claro ejemplo de la sociedad canaria y apuntó que proyectos como este “no solo nos engrandecen como pueblo que ha sabido ver en la emergencia migratoria la grave crisis humanitaria y la historia de cientos de niños, niñas y jóvenes que han tenido que dejar a su familia atrás para tener un presente y un futuro lejos del hambre, de la miseria y de la falta de oportunidades”. Clavijo argumentó que “ese futuro debemos facilitárselo entre todos, primero en los países de origen, pero también a los que están ya aquí prestándoles una atención digna, incorporándolos al sistema educativo e integrándolos en la sociedad, y este es un claro ejemplo de cómo hacerlo, pero para ella sigue siendo necesaria la implicación de España y de Europa”.

El presidente Clavijo conoció de primera mano precisamente el proyecto para la inclusión de jóvenes migrantes ‘Sentir La Isleta: convivir para entender’ por el que este centro de la capital grancanaria ha sido reconocido con dos galardones estatales: el Premio Nacional de Educación para el Desarrollo Vicente Ferrer y el de Aprendizaje-Servicio, concedidos respectivamente por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y distintas entidades de prestigio en colaboración con el Ministerio de Educación.

El proyecto, consistente en la creación de un taller solidario de reparación de bicicletas, fue concebido el pasado curso como un proyecto de enseñanza-aprendizaje entre estudiantes de primero de Bachillerato del instituto público y jóvenes migrantes alojados en un centro de acogida ubicado en el barrio, el Canarias 50.

Los jóvenes extranjeros, que en su mayoría eran de origen subsahariano, habían llegado a las Islas en patera meses antes, y las bicicletas que repararon junto a los estudiantes del IES fueron donadas a asociaciones vecinales con el fin de que pudieran usarlas otras personas del barrio, como han explicado al presidente durante su visita al centro el propio alumnado, su directiva y los profesores Iván Ojeda y Taide Fleitas, coordinadores de ‘Sentir La Isleta’ que se muestran orgullosos de haber podido compartir conocimientos, vivencias y culturas con el colectivo de personas migrantes.

Clavijo, por su parte, ha querido felicitarles tanto por la iniciativa como por los galardones que ha supuesto para ellos y para el centro, máxime en un contexto como el actual, marcado tanto por el aumento de llegadas de estas personas a nuestras costas (cerca de 2.000 personas en lo que va de 2024) como por la falta de solidaridad que, en materia de acogida, han mostrado hacia Canarias otras administraciones.

El viceconsejero de Educación del Gobierno canario, José Manuel Cabrera, que también ha asistido al acto en representación del consejero del área, Poli Suárez, ha querido sumarse asimismo a ese reconocimiento.

Con el objetivo último de favorecer la creación de espacios de convivencia que ofrecieran una visión real de la situación de los jóvenes acogidos, en total participaron en el proyecto una treintena de jóvenes, entre migrantes y estudiantes. Los primeros participaron no solo en la iniciativa, sino en aquellos aspectos curriculares llevados a cabo en el aula, mientras que los segundos se convirtieron en agentes activos de su propio proceso de enseñanza-aprendizaje al atender a una situación real de carácter social que lleva tiempo viviéndose en Canarias y, en particular, en el barrio de La Isleta.

Así lo explicaron sus responsables, empeñados en contrarrestar noticias falsas y comentarios xenófobos que, pese al carácter intercultural que tradicionalmente ha caracterizado La Isleta, venían detectando en el entorno del centro.

Así, según la coordinación de ‘Sentir La Isleta: convivir para entender’, a lo largo del curso 2022-2023 se “generaron espacios y tiempos donde pudieran convivir de forma relajada, conocerse, hablar y compartir lo que les une, más que lo que les separa como jóvenes”.

Además, se buscó “generar sentimientos de amistad que permitieran ver los procesos migratorios y, en particular a los usuarios de Canarias 50, de forma más amable, haciéndolo extensible a las familias de los estudiantes y del barrio en su conjunto”.